Un problema tonto
Así le dijo un militar a Joselyn Prato el día que fue detenida: “Tranquila, lo que ocurrió es un problema tonto, en cualquier momento te soltamos”. Pero pasaron 68 días después de esa frase. 68 días con sus largas noches. Y un itinerario pavoroso de calabozos, golpes, maltrato, humillación y violaciones a los derechos humanos. Todo por abuchear a una ministra en una playa. Un detalle: Joselyn Prato no estaba cuando ocurrió el incidente.
Esta es su historia.
Para nosotros ya no es noticia. Para ella siempre lo será.